Los mejores remedios naturales para el apoyo de la salud respiratoria

Los mejores remedios naturales para el apoyo de la salud respiratoria

La frecuencia respiratoria de un adulto en reposo es de 12 a 20 respiraciones por minuto. Los pulmones son metódicos en su búsqueda rítmica de oxígeno y liberación de dióxido de carbono. Su tarea principal es traer aire fresco para oxigenar las células del cuerpo mientras eliminan los gases nocivos.

Por otra parte, los pulmones ayudan a protegernos de las toxinas al toser sustancias para que puedan eliminarse adecuadamente del cuerpo. Diferentes nutrientes y factores de estilo de vida pueden tener un efecto positivo en la salud pulmonar de las personas con y sin enfermedad en la zona de los pulmones.

¿Cómo están estructurados los pulmones?

Físicamente, los pulmones se dividen en lóbulos que están rodeados por una membrana conocida como pleura. Los bronquios dentro de los pulmones están revestidos con cilios que tienen capacidad para sacar la mucosidad. Esta es importante porque acumula polvo, gérmenes y cualquier otro material indeseable. Al final de los tubos bronquiolos, hay pequeños sacos llamados alvéolos donde se intercambian oxígeno y dióxido de carbono.

Cabe señalar que los pulmones también son un lugar en el cuerpo donde pueden ocurrir una gran cantidad de enfermedades humanas.

Condiciones respiratorias

Las enfermedades respiratorias pueden afectar significativamente la calidad de vida y pueden provocar discapacidad e incluso la muerte. Según el Foro de Sociedades Respiratorias Internacionales, las cinco afecciones respiratorias más comunes y graves en todo el mundo son las siguientes:

  • Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)
  • Infecciones del tracto respiratorio
  • Tuberculosis (TB)
  • Cáncer de pulmón
  • Asma

Otras enfermedades pulmonares no infecciosas incluyen:

  • Fibrosis pulmonar: Es un tipo de enfermedad pulmonar intersticial y se caracteriza por la cicatrización del tejido pulmonar.
  • Hipertensión pulmonar: Esta condición se asocia con presión arterial elevada en la circulación pulmonar. Existen diferentes tipos de hipertensión pulmonar (tromboembólica crónica, por enfermedades cardíacas y pulmonares del lado izquierdo y la hipertensión arterial pulmonar).
  • Sarcoidosis: Se caracteriza por una inflamación crónica que puede afectar muchos órganos, incluidos los pulmones. La inflamación crónica puede resultar en la formación de nódulos en los órganos afectados.
  • Pleuresía: Ocurre cuando se da la inflamación de las capas delgadas de tejido que cubren los pulmones llamadas pleura.
  • Fibrosis quística: Es un trastorno genético caracterizado por la producción de una mucosidad espesa que puede bloquear las vías respiratorias y causar dificultad para respirar y daño pulmonar.
  • Respiración alterada durante el sueño: También conocido como apnea del sueño, que ocurre durante el sueño y cuando las vías respiratorias superiores de los pulmones colapsan debido a que los músculos de la garganta se relajan. Esto resulta en un bloqueo del flujo de aire.

Soporte respiratorio

A través de una combinación de dieta, estilo de vida y suplementos dietéticos, podemos proteger y mejorar la salud pulmonar y reducir el riesgo de afecciones pulmonares no infecciosas.

  • Dieta

La contaminación del aire, las infecciones y el humo del tabaco contribuyen al estrés oxidativo y la inflamación que pueden conducir a la EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica). Los estudios muestran que las personas con EPOC a menudo siguen una dieta inflamatoria que no incluye suficientes frutas y verduras. Esto puede ayudar a reducir el riesgo de ciertas afecciones respiratorias (asma), debido al papel de los antioxidantes en la reducción del estrés oxidativo y la inflamación asociada.

Las grasas saludables también son importantes en cualquier régimen, por lo que la dieta mediterránea destaca entre aquellas que ayudan a mejorar la salud pulmonar, incluso entre los fumadores. Además, cuando la dieta mediterránea se combina con ejercicio, tiene más beneficios y favorece la función pulmonar general en adultos sanos.

  • Estilo de vida

Es fundamental garantizar una buena calidad del aire interior en tu hogar y practicar ejercicio con regularidad, entre otros hábitos saludables a tener en cuenta.

Es bien sabido que el factor de estilo de vida más peligroso para la salud pulmonar es fumar, y es la principal causa de EPOC y cáncer de pulmón. Por lo tanto, lo primordial debe ser dejar de fumar, en caso de que seas fumador. Sería la mejor decisión para empezar a reducir el riesgo de enfermedades pulmonares no infecciosas.

Respecto a la optimización de la calidad del aire interior, asegúrate de que tu hogar tenga la ventilación adecuada, considera invertir en un sistema de purificación de aire, mantén el entorno limpio eliminando los contaminantes con regularidad, y repara cualquier fuga o área donde se pueda acumular humedad. La exposición a la contaminación del aire interior y exterior puede afectar negativamente la salud pulmonar y verificar el índice de calidad del aire local de su ciudad puede ser útil para prevenir la exposición a la contaminación del aire exterior.

De cara al ejercicio físico de manera regular, este puede tener un efecto positivo en la salud pulmonar. Una mayor aptitud cardiorrespiratoria a una edad temprana y en la edad adulta puede estar asociada con una menor disminución de la función pulmonar con el tiempo. Los ejercicios de respiración, que son una forma más pasiva de ejercicio específico para la conexión mente-cuerpo, también pueden mejorar la función pulmonar. Un metaanálisis que examinó los efectos de los ejercicios de respiración en personas con cáncer de pulmón después de la cirugía determinó estos ejercicios pueden mejorar significativamente la calidad de vida y la función pulmonar posoperatoria de las personas que padecen esta enfermedad.

  • Suplementos dietéticos

Aunque hay evidencia de que ciertas vitaminas pueden ser útiles para mejorar los síntomas de la EPOC, no está claro qué forma es más efectiva, la suplementaria o la dietética. Según una revisión sistemática de 2010, se demostró que los complementos de vitaminas C, D, E y A ayudan a mejorar los síntomas de la EPOC gracias a su acción antiinflamatoria. Una revisión de 2018 mostró que la deficiencia de vitamina A es un factor que contribuye a muchas enfermedades pulmonares (EPOC, fibrosis pulmonar, cáncer de pulmón y asma).

Otros nutrientes como los ácidos grasos omega-3, las antocianinas, la curcumina y las catequinas también pueden favorecer la salud pulmonar y reducir el riesgo de enfermedades pulmonares. Esto se debe gracias a los efectos antioxidantes y antiinflamatorios de estos suplementos alimenticios.

Para terminar, son muchas las plantas medicinales que poseen propiedades antiinflamatorias que contribuyen a la protección de los pulmones. Además de la curcumina que se encuentra en la cúrcuma y las catequinas que se encuentran en el té verde, otras hierbas y componentes de plantas que han demostrado reducir el riesgo y los síntomas de la EPOC y el asma incluyen luteolina, quercetina, apigenina y astrágalo.

Conclusión

En resumen, las enfermedades pulmonares pueden impactar dramática y negativamente en la calidad de vida del paciente, además de poner en riesgo su vida. Por ello, merece la pena tomar medidas proactivas para prevenir estas enfermedades respiratorias. Podemos mejorar nuestra salud pulmonar a través de una combinación de dieta, estilo de vida y suplementos cuando sea necesario. En cualquier caso, es importante que hables con un profesional de atención médica integral antes de realizar cambios en tu rutina de salud.

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